Las zonas chill out tienen un no sé qué que nos evoca a esas islas paradisíacas donde te tumbas en una hamaca con un cóctel exótico en la mano para disfrutar de la puesta de sol. Pero, no hace falta coger un avión e ir a la otra punta del mundo para relajarse. A continuación, te daremos una serie de consejos sobre cómo montar un chill out en tu terraza o jardín teniendo en cuenta la decoración y el diseño para que puedas disfrutar del relax cada día.

Define el estilo

Antes de empezar a montar el rincón chill out en tu terraza debes definir qué estilo quieres que siga porque éste determinará los siguientes pasos. Con cuál te quedas, ¿estilo tropical, bohemio, moderno, rústico o minimalista?

Muebles resistentes

El mobiliario es el primer punto que debes tener en cuenta y este debe ser resistente al clima, así que apuesta por fibras naturales o sintéticas y textiles que sean cálidos, impermeables y suaves. 

Una zona con sombra

Para crear una zona exterior donde relajarse debes elegir un rincón que esté protegido de las altas temperaturas. Escoge un punto que esté a la sombra de un árbol o una parra, por ejemplo, o si no dispones de elementos naturales que te puedan proteger del sol opta por un parasol o un buen toldo.

Las vistas

Este punto es quizás el más complicado, pero no es imprescindible. Evidentemente las (buenas) vistas ayudan a crear atmósfera, pero cada uno tiene lo que tiene en casa y hay que adaptarse. Si tienes piscina o vistas al mar o a un buen paisaje, no hay duda, la zona chill out debe ir colocada contemplando la panorámica, pero si no siempre puedes optar por crear una especie de jungla tropical con plantas y flores y diseñar así tu propio entorno idílico.

La iluminación es clave

Las zonas chill out resultan especialmente atractivas cuando se pone el sol, pero lo que las hace realmente atractivas es que la iluminación creen un ambiente suave y acogedor. Nuestra recomendación es que apuestes por luces LED, luces de fibra natural, antorchas o lámparas solares y si estas disponen de regulador para poder ajustar el nivel de luz según la hora del día, mucho mejor.

El sofá, el rey del chill out

El sofá es el mueble que no puede faltar nunca en una zona chill out. La clave está en qué sea confortable y cómodo. No importa que tenga un respaldo bajo o que sea un sofá hecho con palets. La clave del éxito es que no quieres moverte de allí durante horas.

Infinidad de cojines

Si algo caracteriza las zonas chill out es el comfort que desprenen, y ¿cómo conseguimos este toque de confort? ¡Añadiendo muchos cojines! Llena el sofá y el suelo con cojines, mezcla tamaños, materiales y colores, juega con la colocación… ¡En un rincón chill out nunca hay demasiado cojines!