Uno de los mejores materiales para el mobiliario exterior, desde mesas hasta sillas o tumbonas, es el aluminio. Además de ligero, es resistente al óxido y soporta muy bien las inclemencias del tiempo. A continuación, te explicamos las propiedades y ventajas del aluminio, y por qué se considera uno de los mejores materiales para los muebles de exterior.
Resistencia al óxido
El aluminio destaca por su resistencia al óxido, una cualidad esencial para mobiliario exterior. Las sillas o mesas de aluminio para exteriores no mostrarán signos de desgaste o corrosión, ni siquiera después de permanecer a la intemperie durante mucho tiempo. Gracias a su resistencia al desgaste, es uno de los favoritos y lo hacen ideal para soportar elementos como el sol, el viento o la lluvia.
Ligereza
Comparado con materiales como la madera o el metal, el aluminio es notablemente más ligero, pesando sólo una cuarta parte de otros metales. Esta ligereza facilita el manejo, transporte y almacenamiento de los muebles, haciéndolos prácticos para el uso diario.
Precio
En términos de precio, los muebles de aluminio suelen ser más accesibles que aquellos hechos de materiales más costosos como el acero inoxidable o la madera maciza. Además, su mantenimiento es económico y sencillo, no requiere pintura ni sellado y, además, tampoco hay que preocuparse por su posible oxidación.
Durabilidad
El aluminio es un material muy resistente que no se deforma con el tiempo, no se oxida, y es altamente resistente a la abrasión. Su durabilidad lo hace ideal para climas costeros o húmedos, donde otros materiales podrían deteriorarse rápidamente. Los muebles de aluminio permanecen intactos tanto estéticamente como funcionalmente por años.
Buen aislante térmico
Aunque el aluminio puede calentarse en climas cálidos, es un excelente material para evitar el sobrecalentamiento y se enfría rápidamente, disipando el calor muchísimo más rápido que el hierro.
Estas propiedades térmicas aseguran que los muebles de aluminio no alcancen temperaturas extremas, permitiendo su uso seguro incluso en días calurosos.
Alto potencial de reciclaje
Una de las grandes ventajas del aluminio es que es un material altamente reciclable, que mantiene su calidad incluso después de múltiples ciclos de reciclaje. Su producción y reciclaje contribuyen a la sostenibilidad ambiental. Además, a nivel industrial y doméstico, los desechos de aluminio se recuperan y reciclan eficientemente, demostrando su compromiso con prácticas ambientales responsables.
En conclusión, el aluminio emerge como una elección excepcional para muebles de exterior, ofreciendo una mezcla inigualable de ligereza, resistencia y versatilidad estética. Su capacidad para resistir la corrosión y adaptarse a diversas condiciones climáticas lo convierte en una inversión duradera y práctica para cualquier espacio al aire libre.