La llegada del verano trae consigo una subida considerable de temperaturas. Para que el calor no te impida disfrutar de tu terraza o jardín a cualquier hora del día te aconsejamos añadir a tu mobiliario un buen parasol. Pero ¿cuál elegir? ¿Qué características debe tener? Te contamos todos los factores que debes valorar para elegir el mejor parasol para tu jardín.
Ten en cuenta la climatología
Lo primero que debes valorar es la climatología de la zona donde vives. Si el clima es muy húmedo descarta los parasoles de teca o madera. La mejor opción siempre es decantarse por un parasol de aluminio y acero inoxidable, resistentes a cualquier inclemencia meteorológica y, sobre todo, protegerlos con una funda durante la temporada de frío para que su durabilidad sea mayor.
El tejido de la capota
La tela es otro de los elementos imprescindibles a tener en cuenta. El tejido, con su correspondiente gramaje y densidad, es clave para disponer de un buen parasol en nuestro jardín o terraza. El poliéster suele ser la alternativa más habitual y recomendada, ya que cuenta con propiedades impermeables.
El tamaño del parasol
Otro punto muy importante a tener en cuenta es el tamaño de la zona que queremos proteger con la sombra del parasol. Si queremos cubrir una mesa, debes calcular que el parasol tenga unos 60 cm de más que la mesa por cada lado para que todos los comensales queden resguardados.
Parasol de mástil fijo, orientable o excéntrico
En cuanto a la funcionalidad del parasol, debes valorar qué uso le vas a dar para elegir si quieres que su mástil sea fijo, orientable o excéntrico. Los parasoles fijos son los que tienen el mástil recto y pueden colocarse en el agujero central de una mesa. Por otro lado, los orientables poseen un mástil desmontable y una pieza mecánica situada en la parte superior que sirve para orientar la tela dependiendo de la posición del sol. Finalmente, el parasol de mástil excéntrico es orientable y regulable debido a la incorporación de una pieza deslizante, y a su manivela.
¿Vas a moverlo o lo tendrás siempre en el mismo lugar?
También debes valorar si vas a tener el parasol en el mismo lugar o vas a ir moviéndolo. En el caso de querer manejarlo con regularidad, lo mejor es que sea muy ligero. Aún así, es muy importante que el parasol esté ubicado sobre una base con suficiente peso. De hecho, la elección de la base es clave porque de ella dependerá el cumplimiento total de las funciones del parasol.